LA LLAMADA DE BUCK
#QuerermásQuererMejor
Centro acreditado por la Asociación Nacional de Adiestradores Caninos Profesionales con número de registro: S-0182/2022
Centro de Adiestramiento y Educación Canina en Laredo
Centro acreditado por la Asociación Nacional de Adiestradores Caninos Profesionales con número de registro: S-0182/2022
Si resides en Cantabria y buscas un servicio de Educación o Adiestramiento Canino respetuoso, basado en la ciencia más actual y el conocimiento, empático y amable, además de eficaz a la hora de abordar problemas de comportamiento, La Llamada de Buck es tu espacio.
Con nosotros podrás iniciar un proceso de Educación Temprana junto a tu cachorro, resolver problemas de comportamiento de tu perro o mejorar vuestra coordinación en momentos clave de la vuestra vida cotidiana, como son los paseos.
Además, somos especialistas en problemas de base emocional como son miedos arraigados, descargas de frustración, ansiedad por separación o reactividad.
Llámanos, háblanos de tu perro y concertaremos una primera sesión de evaluación en la que podamos conocer los detalles de tu caso.
Nos encontramos en Baltezana, en la zona de Ontón.
Contacta con nosotros y realizaremos una primera sesión de evaluación de forma que podamos planificar contigo el trabajo a desarrollar contigo y junto a tu perro.
Si resides en Laredo, nuestro centro de educación canina se encuentra en la frontera entre Bizkaia y Cantabria, concretamente a la altura de Baltezana (Castro Urdiales), en una ubicación privilegiada que combina naturaleza y tranquilidad con un sencillo acceso desde la Autovía A-8.
Contamos tanto con amplios espacios de trabajo exterior, así como interiores.
Puedes concertar una primera sesión de evaluación para conocer y valorar tu caso en profundidad o llamarnos para visitarnos y consultarnos cualquier duda.
Desde un enfoque cognitivo emocional, los educadores caninos y adiestradores que conformamos La Llamada de Buck consideramos que abordar el bienestar integral de tu perro es la manera más eficaz para solucionar o mejorar los comportamientos que te preocupan y, paralelamente, avanzar en su bienestar y felicidad.
¿Qué consideramos un perro feliz? Un perro equilibrado en lo emocional, satisfecho en sus necesidades físicas y cognitivas y adaptado al entorno social, tanto familiar como externo, en el que vive.
Nuestra experiencia a lo largo de los años nos ha demostrado que únicamente abordar las conductas o comportamientos que nos preocupan y dejar en un plano secundario el bienestar integral del perro produce mejoras parciales y poco sólidas.
Por ello nuestros programas de trabajo desarrollan ambos enfoques: las mejoras a corto plazo, con el avance en aquellas áreas de la vida del perro que afectan a su bienestar global y que consolidan que las mejoras sean consistentes.